
-Viñas Queirolo presenta una gran variedad de uvas pisqueras que han
impulsado la producción de nuevos vinos que se denominan patrimoniales.
-Los vinos patrimoniales buscan ser el complemento perfecto para realzar y
acompañar los sabores peruanos.
– La oferta en bebidas Ready To Drink viene ganando espacio, gracias a su
practicidad y preferencia entre los consumidores.
Lima, noviembre del 2023.- Con el objetivo de preservar la cultura y las tradiciones
vitivinícolas en el Perú, Intipalka viene produciendo nuevos vinos a partir de las variedades de
uvas patrimoniales que se cosechan en el país, como las tradicionales Negra Criolla y
Moscatel de Alejandría (o Italia), y criollas, como la Quebranta y Torontel, que acompañan
muy bien nuestra diversa y valorada gastronomía.
El especialista en vinos, Luis Gómez, enólogo de Viñas Queirolo, comenta que los vinos
patrimoniales son llamados de esta manera porque son, justamente, parte de nuestro
patrimonio vitivinícola y, al haber una tendencia mundial por la recuperación de estas cepas
propias de cada país, debido a su arraigo histórico y cultural, se han convertido en la nueva
apuesta de la industria del vino en el Perú, una oportunidad para continuar creciendo
internacionalmente.

Asimismo, Piero Fumagalli, gerente de marketing de Santiago Queirolo, afirma que la
producción de estos vinos son una gran oportunidad para demostrar un producto distintivo
nacional en el extranjero. “Intipalka presenta esta nueva línea de vinos Patrimoniales, tres
nuevas etiquetas: Quebranta, Negra Criolla y Torentel, con el objetivo de innovar en la oferta
de nuestros vinos los cuales creemos se convertirán en el acompañamiento perfecto de
nuestra gastronomía”, agrega el directivo.
Actualmente, en la extensa área de cultivo de Viñas Queirolo, se encuentran alrededor de
siete variedades patrimoniales o pisqueras de uva, y se viene trabajando con cuatro de ellas
debido al perfil gastronómico que tienen, las cuales tienen excelentes cualidades para crear
vinos sin nada que envidiar de otros. Sin duda, existe una corriente y se espera que más
bodegas apuesten por la producción de vinos patrimoniales, ya que esto impulsa que, en
otras regiones, como Arequipa o Lunahuaná, se ofrezcan vinos novedosos.
Otra nueva propuesta de Santiago Queirolo este año, es su propia línea de bebidas ‘ready to
drink’ o licores listos para tomar, a base de nuestra bebida bandera, el pisco. Chilcanos SQ,
en sus presentaciones de limón y masco (ciruela), mantienen el sabor y la calidad que
caracteriza a la marca. Además, dada su practicidad, esta categoría viene ganando cada vez
más fanáticos en el mercado peruano, sobre todo entre los jóvenes, considerados como los
‘heavy users’.
Con esta apuesta, según Fumagalli, la marca busca generar mayores ocasiones de consumo
del destilado, así como acercarse a las nuevas generaciones. “Esta es una categoría muy
dinámica, el público joven busca constantemente nuevas opciones y nuestra participación
apunta a que se logre una identificación plena con el consumidor, usando un lenguaje fresco,
divertido y cotidiano. Además, tiene el estilo de packaging que resalta el espíritu de los
jóvenes, así como una comunicación que conecta con ellos, lo que le da una personalidad”,
enfatiza.
Este reciente proyecto tiene como objeto seguir consolidando la presencia de la marca en el
mercado, sobre todo, su participación en este segmento. Por el momento con los sabores de
limón y ciruela, pero en un mediano y largo plazo, Santiago Queirolo contempla la
presentación de nuevos sabores y nuevas líneas de RTD que sigan sorprendiendo a los
consumidores.